El principal objetivo de esta primera fase es llevar a cabo un Diagnóstico Inicial de la Situación de la Empresa para adquirir un conocimiento de la actualidad y situación global de la misma, el nivel de riesgo y su contexto. Así, podremos tomar las primeras decisiones de forma adecuada y priorizar las diferentes acciones en el próximo periodo.

El principal objetivo de esta primera fase es llevar a cabo un Diagnóstico Riguroso e Integral de la Situación Actual de la Empresa y adquirir un conocimiento riguroso de la actualidad y situación global de la empresa u organismo, el nivel de riesgo y su contexto. Así, podremos tomar las primeras decisiones de forma adecuada y poder priorizar las diferentes acciones en el próximo periodo.

En esta segunda fase, lo que procuramos es asegurar la viabilidad de la empresa a corto plazo con el desarrollo de un plan de acción, que nos va a permitir organizarnos, planificar, ejecutar, evaluar y corregir las situaciones que se configuren como prioritarias a corto plazo y repercuten en la eficiencia y competitividad de la entidad.

El plan estratégico es un programa de actuación, basado en la definición del modelo de negocio, que consiste en aclarar lo que pretendemos conseguir a medio y largo plazo, y cómo nos proponemos conseguirlo. Esta programación se plasma en un documento de consenso, donde concretamos las grandes decisiones que van a orientar nuestra marcha hacia la gestión excelente.

En esta última fase, se aportan todas las herramientas de gestión y control bajo el asentamiento de una cultura de acción que permitirá hacer realidad todo lo planificado anteriormente y, por supuesto, el acompañamiento durante todo el proceso de implantación del Plan Estratégico en la empresa, y junto a sus directivos, para la consecución de los objetivos planteados.